Somos lo que comemos: ¿cómo puede afectar nuestra dieta al cerebro?

La principal energía que necesita el cerebro para funcionar es la glucosa que proviene de comer alimentos ricos en carbohidratos, como cereales, legumbres, frutas y vegetales, así como productos lácteos.

Por Canal26

Sábado 29 de Julio de 2023 - 10:42

Cerebro. Foto Unsplash. Cerebro. Foto Unsplash.

El cerebro es el órgano más importante de nuestro cuerpo y funciona como un director de orquesta, dirigiendo las diferentes partes para el correcto funcionamiento del organismo. Se trata del órgano principal del sistema nervioso, encargado de regular todas nuestras funciones vitales.

Cerebro. Foto EFE. Cerebro. Foto EFE.

El cerebro representa sólo el 2% de nuestro peso, pero necesita alrededor del 20% de la energía que ingerimos. Si nosotros “somos lo que comemos”, entonces nuestro cerebro también dependerá de lo que comamos.

La glucosa es un carbohidrato simple que es fundamental para el cerebro, y la podemos encontrar en distintos alimentos como pan blanco, cereales, avena, papas, arroz, miel, azúcar, frutas y verduras. Pero, este órgano además necesita otros nutrientes esenciales: vitaminas, minerales, ácidos grasos y proteínas.

Longevidad. Foto: Unsplash.

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¿Cómo puede afectar la alimentación al cerebro?

En primer lugar, nuestro cerebro al igual que cualquier parte de nuestro cuerpo, necesita alimentarse y el rendimiento del mismo va a depender de los nutrientes que reciba. Ahora bien, la composición de cada comida tiene un efecto directo en la producción de las señales químicas del cerebro de la que se encargan los neurotransmisores y, en consecuencia, esto va a influir sobre nuestro humor y comportamiento, además de ayudar a aliviar la depresión, la ansiedad, la neurosis y los trastornos del sueño.

Funciones del cerebro. Foto Unsplash. Funciones del cerebro. Foto Unsplash.

Cada uno de los neurotransmisores existentes requieren determinados nutrientes que proporcionan los diferentes alimentos. Por ejemplo, hay una sustancia denominada triptófano que es imprescindible para sintetizar un neurotransmisor denominado serotonina, que está relacionada con las emociones, la depresión, el control de la temperatura, del hambre y del sueño. Esta sustancia se encuentra en los lácteos (quesos, leche), huevos, pescados, carnes, legumbres, frutos secos y frutas (plátano, piña, aguacate). Así, un déficit del mismo implica un fallo en los circuitos que requieren esta sustancia.

Respiración 4-7-8. Pexels

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Recomendaciones

Comer bien mejorará nuestro estado de ánimo, hará que pensemos más rápido, tendremos más memoria, entre otras cosas. Podemos mejorar la salud y las funciones del cerebro a través de una buena alimentación.

Prebióticos y salud intestinal. Foto: Unsplash Alimentación saludable. Foto: Unsplash

Se recomienda intentar comer alimentos que sean ricos en carbohidratos ya que son nuestra fuente de energía. Los ácidos grasos también son esenciales, ya sea del pescado o de suplementos dietéticos. Además, es deseable incluir alimentos ricos en proteínas ya que estas son esenciales para fabricar los neurotransmisores que son vitales para los procesos cerebrales. Se debe intentar que la comida del mediodía sea rica en proteínas, para optimizar la mente y mantenerse más despierto por la tarde.

Los alimentos ricos en vitaminas y minerales poseen la llave para que muchas reacciones del cuerpo puedan llevarse a cabo. A su vez, es importante beber 2 litros de agua por día para que el organismo se mantenga hidratado y así, funcione mejor el cerebro. Por último, el ejercicio físico y las comidas ligeras y frecuentes son convenientes para oxigenar el cerebro.

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