Gatos que se comportan como perros: qué hacer al respecto y cuándo hay que preocuparse

Gatos que se comportan como perros. Foto Freepik.

A pesar de que los gatos y los perros sean dos especies completamente distintas con comportamientos muy diferentes, es normal que los felinos adopten conductas que se asemejan más a los canes que a su propia especie. En ese contexto, surge la gran duda de los dueños, que no saben si preocuparse o dejarlos ser, ¿es malo o hay que tomar alguna medida al respecto?

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¿Por qué algunos gatos se comportan como perros?

Si son dos especies completamente distintas con patrones de comportamiento que dependen de la domesticación y la evolución, hay algunas razones por las que un gato puede comportarse como perro:

1- Criado con perros

Si un gato es criado con perros o en un ambiente con perros, puede aprender ciertos comportamientos caninos y adoptarlos en su comportamiento diario.

Los gatos y los perros pueden tener conductas similares. Foto Freepik.

2- Carácter individual

Al igual que los humanos, cada gato tiene su personalidad única, y algunos pueden ser más juguetones, leales o extrovertidos, lo que puede parecerse a los comportamientos típicos de un perro.

3- Interacción con humanos

La interacción cercana con sus dueños y el aprendizaje por imitación pueden llevar a que algunos gatos adopten comportamientos similares a los de los perros para obtener atención y afecto.

Gatos y perros. Foto Freepik.

4- Curiosidad natural

Algunos gatos son naturalmente curiosos y aventureros, lo que puede llevarlos a realizar acciones más comúnmente asociadas con los perros, como seguir a sus dueños en paseos o traer objetos para jugar.

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¿Es malo que mi gato se comporte como un perro?

En realidad, no tiene nada malo si tu gato se comporta como un perro, siempre y cuando esté sano y feliz. Cada gato es único y puede desarrollar comportamientos distintos, pero es muy importante que todos tengan sus necesidades básicas cubiertas y estén bien cuidados. Algunos consejos para que tu gato esté cómodo y a gusto:

Gatos y perros. Foto Freepik.

• Proporcionar un entorno enriquecido con diferentes juguetes para entretenerlo.
• Visitar al veterinario frecuentemente.
• Brindar tiempo de calidad.
• No comparar con otros gatos.
• Respetar su individualidad