Saltar la soga: la alternativa a los 10.000 pasos diarios que recomiendan los expertos

Actividad física. Foto: Unsplash.

En un mundo donde el sedentarismo se convirtió, poco a poco, en uno de los principales enemigos de la salud, encontrar actividades físicas efectivas y accesibles para cualquier persona resulta fundamental, especialmente a la hora de cuidar la salud. 

Mientras que caminar 10.000 pasos diarios fue ampliamente promovido por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una excelente forma de mantener la salud cardiovascular y mental, una actividad menos convencional pero sorprendentemente efectiva ganó popularidad entre los expertos: saltar la soga. 

Saltar la soga. Foto Unsplash.

Caminar, especialmente al aire libre, no solo combate el sedentarismo, sino que también mejora el estado de ánimo y fortalece la salud cardiovascular al mejorar la circulación sanguínea. Sin embargo, según estudios recientes, saltar la soga durante solo 10 minutos al día puede ofrecer beneficios aún mayores.

Un estudio publicado en la revista What's Cooking of America reveló que saltar la soga por 10 minutos puede quemar hasta 130 calorías. Este ejercicio, que solo requiere una cuerda y un pequeño espacio, resulta ser más eficiente que caminar en términos de quema de calorías y pérdida de peso.

Peter Schulman, profesor asociado de Cardiología y Medicina Pulmonar en la Universidad de Connecticut Health Center, destacó que saltar la soga mejora la resistencia cardiovascular y optimiza la capacidad aeróbica, mejorando la oxigenación del cuerpo.

Actividad física. Foto: Unsplash.

Además de sus beneficios cardiovasculares, saltar la soga también mejora la conexión entre el cerebro y los músculos, ya que requiere coordinación, equilibrio y concentración. Este ejercicio también incrementa la capacidad pulmonar y proporciona un mayor nivel de oxigenación, crucial para un rendimiento físico óptimo.

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Consejos para una práctica segura y efectiva

Para aquellos interesados en incorporar esta actividad en su rutina diaria, es esencial seguir algunas recomendaciones. Primero, contar con la aprobación de un profesional médico. Luego, prestar atención a la técnica: los codos deben estar flexionados en un ángulo de 90 grados y moverse solo las muñecas, manteniendo el core activo y la espalda recta.

Saltar la soga. Foto Unsplash.

Elegir una soga adecuada para nuestra altura, comenzar con saltos básicos, e incrementar gradualmente la duración y velocidad del ejercicio son pasos fundamentales para una práctica segura y efectiva. Además, es importante no olvidar calentar antes de comenzar y estirar al finalizar para prevenir lesiones. 

En tiempos donde el estrés y la ansiedad son comunes, especialmente post-pandemia, saltar la soga funciona no solo como una alternativa efectiva a caminar, sino también como una excelente forma de liberar endorfinas y mejorar la función cognitiva.