Detrás de un mito: ¿cuáles son las causas más comunes de la caspa y cómo combatirla?

Cabello con caspa. Foto: Unsplash.

La caspa, señalada como un problema de higiene, es objeto de malentendidos generalizados. Sin embargo, la Academia Estadounidense de Dermatología (AAD) desmitificó las creencias populares del origen de la afección y destacó que no está vinculada a la falta de limpieza, sino a cuestiones más profundas.

Desde la piel grasa hasta los hábitos específicos de cuidado del cabello y condiciones médicas subyacentes, pueden ser motivos suficientes para padecer esta problemática. Además, los químicos con los que se elaboran los productos para el cabello también pueden ser una causa común en los casos más severos de caspa. 

En una declaración reciente, la Dra. Mona Sadeghpour, dermatóloga certificada por la junta en Pittsburgh, Pensilvania, y Lone Tree, Colorado, recalcó la diversidad de causas de la caspa y desaconsejó asociarla automáticamente con la falta de limpieza. Durante los meses fríos de invierno, el cuero cabelludo tiende a descamarse y picar debido a la combinación de aire frío y calor seco, lo que agrava la situación en quien lo padece. 

El shampoo anticaspa es ideal para solucionar los problemas de caspa. Foto: Unsplash

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¿Cuáles son los tratamientos para combatir la caspa?

Afortunadamente, la AAD ofrece una guía clara sobre cómo abordar este problema. En casos leves, el lavado regular del cabello en casa puede ser suficiente. Sin embargo, para situaciones más persistentes, la clave está en la elección de un shampoo especialmente formulados para el control de la caspa que contienen piritionato de zinc, ácido salicílico, azufre, sulfuro de selenio, ketoconazol o alquitrán de hulla.

Cuando estos productos para el lavado del cabello no cumplen con las expectativas, la AAD sugiere la alternancia entre productos con diferentes ingredientes activos y enfatiza la importancia de seguir las instrucciones de uso, que en algunos casos implican un tiempo de reposo en el cuero cabelludo antes de enjuagar.

Para casos leves, el lavado regular del cabello puede ser un tratamiento eficaz contra la caspa. Foto: Unsplash.

La adaptación del cuidado capilar según el tipo de cabello también desempeña un papel importante en el tratamiento de la caspa. Personas con cabello fino o cuero cabelludo graso pueden requerir una frecuencia de lavado mayor, mientras que aquellas con cabello grueso deben ajustar su rutina de acuerdo a su tipo de cabello.

Además, la protección solar para el cuero cabelludo se vuelve esencial, y más aún en el verano. La Dra. Sadeghpour advirtió sobre el aumento de la descamación de la caspa debido a quemaduras solares, especialmente con productos que contienen alquitrán de hulla, que pueden sensibilizar el cuero cabelludo ante los dañinos rayos UV. Para prevenirlos, la experta recomienda el uso de gorras o sombreros durante los tiempos de exposición.

Pelo. Foto: Unsplash.

Por otro lado, en caso de que los cuidados convencionales no brinden alivio, la recomendación es clara: buscar la orientación de un dermatólogo certificado para abordar la caspa de manera personalizada.