Las altas temperaturas y las abundantes lluvias provocaron una invasión de mosquitos que contribuyó al aumento de las especies transmisora del dengue y la encefalitis equina.
Por Canal26
Domingo 7 de Enero de 2024 - 09:22
Este año el verano llegó acompañado de lluvias abundantes, lo que ocasionó que se den las condiciones propicias para la reproducción de mosquitos que, finalmente, terminó en invasión. Lo preocupante de esta situación es que entre estos insectos se encuentran dos especies portadoras de enfermedades: el aedes albofasciatus y el aedes aegypti.
Estas dos especies son las transmisoras de enfermedades como la encefalitis equina y el dengue, dos patologías que activaron las alertas sanitarias por el incremento de casos en los últimos días.
Es por ello que los especialistas insisten en la necesidad de eliminar los criaderos en los hogares, reducir la exposición al aire libre, utilizar ropa clara y larga, que cubra la piel, y el uso continuo de repelente, además de consultar al médico ante la aparición de la presencia de síntomas como la fiebre y el dolor corporal.
Esto se debe a que durante el mes de diciembre pasado el Ministerio de Salud registró 12 casos de encefalitis equina, de los cuales todos requirieron hospitalización y uno perdió la vida. Mientras que, en relación al dengue, a partir de noviembre se incrementaron los casos autóctonos en provincias como Chaco, Formosa, Corrientes, Misiones, Santa Fe, Santiago del Estero, San Luis, Córdoba, Buenos Aires y CABA.
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Tras la invasión de mosquitos, provocada por las lluvias y las altas temperaturas, los casos de encefalitis equina y dengue se incrementaron provocando de las autoridades sanitarias emitieran una alerta para vigilar el crecimiento de estas enfermedades.
En relación a la encefalitis equina, los especialistas afirman que la mayoría de los casos son asintomáticos. Sin embargo, en los casos sintomáticos, los síntomas aparecen entre los dos y diez días de haber sido picados presentando fiebre, dolor de cabeza y muscular y malestar general que suelen desaparecer de manera espontánea a la semana, aproximadamente.
En cambio, el dengue si presenta síntomas como fiebre mayor a 38,5°C, cansancio, dolor de cabeza y detrás de los ojos, dolor muscular y articular, lesiones en la piel con picazón constante (como si fuese sarpullido), diarrea y los menos frecuentes: sangrado por nariz o encías. Es por ello que ante cualquiera de los signos mencionados es imprescindible la visita al médico.
La encefalitis equina se transmite a través del “mosquito de inundación” que se cría en charcos o cuerpos de agua temporales que se originan a partir de las lluvias. Por lo cual, al no haber forma de terminar con sus criaderos, lo más recomendable es bajar la exposición al aire libre y utilizar ropa manga larga que formen una barrera física en la mayor parte del cuerpo para evitar picaduras.
En el caso del dengue, transmitido por el aedes aegypti, la prevención es diferente ya que estos mosquitos tienen hábitos domiciliarios que les permiten picar en lugares frescos y oscuros. Para impedir su reproducción es importante mantener los lugares secos y limpios, renovar el agua de los bebederos de animales continuamente y utilizar repelente para así evitar su picadura.
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