Su composición los vuelve grandes aliados ya que brinda saciedad y reduce el apetito. Además, aporta fibra, colágeno y proteínas.
Por Canal26
Martes 13 de Agosto de 2024 - 19:00
Los frutos secos suelen ser demonizados por las personas que buscan bajar de peso debido al gran aporte calórico que tienen. Sin embargo, son indispensables para mantener una alimentación saludable, ya que tienen nutrientes y proteínas que el cuerpo necesita.
Un fruto muy poco conocido, y que hace maravillas sobre la salud, son los anacardos. Su composición los vuelve grandes aliados de las personas que quieren bajar de peso corporal, reducir niveles de colesterol y combatir el dolor de las articulaciones.
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Este pequeño fruto seco, que mide entre 3 a 5 centímetros, brinda al organismo una sensación de saciedad. Esto hace que la persona coma menos cantidad de alimento y, por ende, aumente menos de peso. Además, posee ácidos grasos monoinsaturados, los cuales se asocian a la reducción de grasa abdominal.
Este alimento también es fuente de cobre, mineral que promueve la producción de colágeno en el cuerpo, una proteína que es indispensable para la salud de la piel, el cabello y las uñas. Además, ayuda a combatir el dolor muscular o la artritis.
Es el fruto ideal para las personas que tienen colesterol alto, ya que aporta proteínas, fibra y grasas saludables. Su contenido de magnesio y triptófano, por su parte, mejoran la calidad del sueño y ayudan a relajar los músculos.
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Los frutos secos no solo son deliciosos, sino que también son una fuente de nutrientes que se recomienda incluir en la dieta, siempre y cuando se consuman con moderación. Ahora bien, para aprovechar al máximo sus beneficios, hay que activarlos antes de consumirlos.
Si se consumen con moderación, los frutos secos ofrecen las calorías necesarias y un sabor delicioso. Se recomienda comer un puñado por día que son aproximadamente 25-30 gramos. Dentro de los que se pueden activar, se encuentran las almendras, nueces y la chía.
Antes de consumir los frutos secos, es esencial activarlos mediante un proceso de remojo o hidratación para revitalizar sus nutrientes y mejorar la digestión. Este procedimiento engaña al fruto seco haciéndole creer que está a punto de germinar.
Para esto, se recomienda remojar los frutos secos de 4 a 6 horas en agua tibia (entre 40 °C y 45 °C) con una cucharada de sal marina por litro de agua. Después de este paso, solo hay que colarlos y ya están listos para consumir de inmediato.
En el caso de la chía, puedes hidratarla en yogurt y dejar reposar en la nevera durante toda la noche.
Esto ayuda a romper las barreras naturales de los frutos secos, conocidas como antinutrientes. Si prefieres una opción diferente para activar las semillas, también puedes tostarlas previamente o molerlas.
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