Reciclaje: desterrando mitos sobre una actividad más que importante para el medio ambiente

Reciclaje. Foto: Unsplash.

El reciclaje es una manera primordial de reducir la basura y los desechos que no solo ayuda al cuidado y preservación del medio ambiente, sino que también contribuye a la economía. Gracias a esta actividad se abrieron espacios que generan nuevos puestos de empleos, pero no todo pasa por los recicladores, sino también por los consumidores que con pequeños hábitos pueden aportar a la tarea de estos trabajadores.

Para tener mayor conocimiento y conciencia sobre esta tarea es necesario derribar una serie de mitos. A continuación, algunos de los aspectos que se deben tener en cuenta a la hora de reciclar:

Mito N°1: No preocuparse por separar la basura porque hay espacios que se dedican a clasificarlos

Los fragmentos de plástico y vidrio roto pueden contaminar al papel y causar problemas en las trituradoras de alimentos. Lo mismo ocurre con la grasa de los alimentos y demás químicos. Además, los desechos alimenticios, mangueras de gomas, alambres, plásticos de bajo grado y demás, desperdician espacio, contaminan materiales valiosos y representan peligro para los trabajadores.

Reciclaje. Foto: Unsplash.

Mito N°2: Los programas formales de reciclaje eliminan los puestos de trabajo de los clasificadores de basura

En el país muchos de los llamados “cartoneros” pasaron recibir un sueldo por la recolección de desechos reciclables. Además, hay puestos dispuestos para que las personas se acerquen a dejar sus desechos que les facilita el trabajo a los recicladores. Por otro lado, con la clasificación de la basura se protege al trabajador de cualquier tipo de riesgo.

Trabajadores de reciclaje. Foto: Unsplash.

Mito N°3: Los productos elaborados de más de un tipo de material no se pueden reciclar

En la actualidad, los equipos de reciclaje suelen estar equipados con elementos de calor que funden los adhesivos o imanes para separar los metales. Incluso, en el mundo existen empresas de reciclaje que pueden tratar los plásticos “menos deseables”, como bolsas de comida o artículos hechos con resina, o cajas de jugo o leche. Ahora, el rango de desechos reciclables es más amplio.

Mito N°4: Los materiales puede reciclarse una sola vez

Muchos artículos comunes pueden reciclarse varias veces y generar ahorros de energía y recursos naturales. Los vidrios, metales y aluminio pueden reciclarse de manera indefinida sin perder la calidad. De hecho, las latas de aluminio son los productos básicos más reciclados.

Latas de aluminio. Foto: Unsplash.

Si bien las fibras que lo componen se dañan cada vez que se lo recicla, el papel elaborado con contenido reciclado demostró haber mejorado su calidad en los últimos años. El papel de impresión virgen puede reciclarse entre cinco y siete veces antes de dejar de ser útil.

El plástico, por su parte, puede reciclarse una o dos veces en un producto nuevo. Ello se debe a que los polímeros que lo componen se rompen en el proceso de recuperación del material. Sin embargo, se están buscando nuevos usos posteriores, mezclándolo con otros elementos para volverlos más duraderos.

Plásticos. Foto: Unsplash.

Mito N°5: Reciclar no tiene beneficios reales

Según la Agencia de Protección Ambiental, los beneficios de esta actividad son claros. Un ejemplo de ello es que el reciclaje de latas de aluminio ahorra el 95% de la energía necesaria para la fabricación de latas nuevas con materias primas.

Además, ayuda a reducir la basura y, con ella, las enfermedades que provoca, como infecciones bacterianas o micóticas. Por otra parte, los expertos aseguran que es una herramienta valiosa para combatir el cambio climático y la contaminación, entre otros problemas importantes que afectan al planeta.