Científicos investigan el origen de metales pesados en las aves de las Islas Galápagos

Los pingüinos, cormoranes, flamencos y albatros son afectados por este material en Ecuador. Los investigadores consideran que este es un dato clave para mantener el ecosistema.

Por Canal26

Jueves 26 de Septiembre de 2024 - 10:51

Flamencos, laguna Mar Chiquita, Córdoba. Foto X. Flamencos en Islas Galápagos. Fuente: X

Un grupo de científicos investiga el origen de metales pesados en pingüinos, cormoranes, flamencos y albatros de las Islas Galápagos en Ecuador, que en 1978 fueron declaradas como el primer patrimonio natural de la humanidad por la Unesco.

Se trata de la Fundación Charles Darwin (FCD) y el Parque Nacional Galápagos, quienes avanzan en un proyecto para conocer las amenazas que afectan a las aves marinas, ya que esta información es clave para entender el estado del ecosistema.

Un grupo de científicos investigan el origen de metales pesados en las aves de las Islas Galápagos. Fuente: EFE

Entre las amenazas que afectan a las aves figuran la crisis climática, patógenos, metales pesados, interacción humana y especies introducidas. En uno de los objetivos del proyecto, que inició en 2010, se han recolectado plumas de las mencionadas especies para hacer análisis bioquímicos para mercurio, plomo y cadmio.

De acuerdo a Gustavo Jiménez, investigador científico sénior de la FCD, el estudio reveló concentraciones de plomo y cadmio en flamencos, cormoranes y pingüinos.

Islas Galápagos. Foto: Reuters, Alamy Islas Galápagos. Foto: Reuters, Alamy

En este sentido, comentó a EFE que: "Lo interesante fue que, los pingüinos de la colonia más prístina, es decir, de la zona central del islote Marielas cerca de la isla Isabela, salieron con mayor valor en relación a las otras dos colonias".

La principal hipótesis de los científicos es que las corrientes marinas llevan esos metales y se asientan en zonas cerradas como en los islotes Marielas, "que es como una como una cuchara, y ahí se van acumulando y, por ende los individuos, como el pingüino, que es una especie fiel al sitio, tiene mayor concentración que las otras dos colonias que no están en esas áreas", explicó el experto.

Por otro lado, en el caso de los flamencos, se atribuye la presencia de materiales pesados en las lagunas, que son áreas cerradas donde no hay mucho intercambio de agua.

Flamencos, Bolivia. Foto: EFE Los flamencos presentaron concentraciones de plomo en estudios realizados. Foto: EFE

Una vez identificada la presencia de metales pesados en las aves, los científicos trabajan en su segundo paso de investigación para conocer su origen, que puede ser natural o antropogénico, no específicamente por acciones humanas en el archipiélago, sino que pueden llegar por corrientes marinas o atmosféricas.

Isla Galápagos. Foto: EFE

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Cómo afectan los metales a las aves de las Islas Galápagos

La presencia de metales puede afectar el sistema reproductivo de las aves con la pérdida o mala formación de los huevos, propiciar daños en el área digestiva y hasta daño neurológico.

"Si (la presencia de metales) es de origen volcánico, las aves evolucionaron con esos problemas durante miles y millones de años, y se adaptaron, pero el problema es que, cuando estos metales pesados vienen -ya sea por corrientes atmosféricas o marinas- vamos a tener mayor concentración de estos metales", expresó el investigador Gustavo Jiménez.

Al iniciar el estudio, los científicos tenían la hipótesis de que los albatros deberían tener mayor concentración de metales porque salen de las Galápagos hacia las costas continentales de Ecuador, Perú y Chile, en donde hay mayor contacto con barcos, y con contaminantes que llegan del continente por ríos hacia la zona marina.

Investigan la presencia de aves enfermas en las islas Galápagos y alertan por posible brote de gripe aviar. Unsplash. Investigan la presencia de aves enfermas en las islas Galápagos. Foto: Unsplash.

Sin embargo, la sorpresa llegó cuando las muestras en esas aves salieron negativas o con datos "bajo los límites de detección". Por este motivo, los científicos trabajan en tres colonias de pingüinos: dos en la isla Isabela (la más grande del archipiélago situado a unos mil kilómetros de las costas continentales ecuatorianas), y una en Marielas.

También trabajan con cuatro colonias de cormoranes en las islas Fernandina e Isabela, y en dos colonias de albatros en la isla española.

La idea era trabajar en zonas que tengan una interacción antropogénica y otras prístinas para que, con datos científicos y robustos, se elaboren planes de conservación en el archipiélago que, por su rica biodiversidad, es considerado un laboratorio natural que permitió al científico británico Charles Darwin desarrollar en el siglo XIX su teoría sobre la evolución y selección natural de las especies.