Proyecto San Isidro, la iniciativa mexicana para recuperar técnicas antiguas de construcción que reduce las emisiones

Construcciones del Proyecto San Isidro. Foto: Instagram.

El Proyecto San Isidro es una iniciativa que tiene su origen en Tlaxco, a unos 150 kilómetros de la Ciudad de México. El fin de la misma es poder recuperar técnicas antiguas de construcción para retomar parte de su identidad, además de que el proceso reduce las emisiones.

La "Construcción indígena" se lleva adelante con técnicas ancestrales, a base de barro, paja y madera como sus materias primas. Alejandra Caballero, arquitecta que encabeza el proyecto, indicó las ventajas que encuentran en este método.

Construcciones del Proyecto San Isidro. Foto: Instagram.

"Como no vamos a traer materiales de fuera o los menos posibles, pues ya desde ahí estamos reduciendo la huella de carbón", explicó Caballero en declaraciones a DW. Además, aparece como una gran ventaja en el contexto del cambio climático y por la búsqueda de achicar las emisiones.

Norma Juárez, una estudiante, también expresa su entusiasmo por la iniciativa: "Son un legado. Son estructuras que al final dan una identidad". 

Construcciones del Proyecto San Isidro. Foto: Instagram.

Como si fuera poco, también tienen una ventaja antes los fenómenos climatológicos o incluso sismos. "Hay más evidencias de construcciones con tierra que están en pie hoy que han resistido sismos y huracanes, más que el concreto, que es un bebé que tiene 150 años", señaló Caballero.

Estos conocimientos ancestrales pueden ser una gran alternativa para enfrentar el avance del calentamiento global, una de las principales problemáticas de la actualidad.

Según el sitio del Proyecto San Isidro, se trata de "un espacio formativo donde ofrecemos cursos, talleres y actividades que animan a los participantes a explorar diversas formas de construir, comer, cosechar, educar y soñar en armonía con la naturaleza".