Celestino Quijada, el hachero que vio a Hitler vivo en el Cerro Otto de Bariloche
La vida de Celestino Quijada cambió abruptamente un día del año 1945. Mientras se disponía a hacer su trabajo habitual, cortando leña en la espesura de los bosques de Bariloche, fue testigo presencial de algo que nunca había llegado a imaginar y que jamás podría olvidar: vio con sus propios ojos al Führer nazi Adolf Hitler frente a él. Esta es su historia.
Adolf Hitler y Celestino Quijada.
En mundo se divide -entre otras cosas- entre quienes creen y quienes no. Hablamos, claro, de la historia oficial enfrentada a los hechos que, tantas veces, se dan fuera tras las bambalinas del poder y del conocimiento de la gente. Y en el camino encontramos personajes que con sus testimonios dan pistas -o datos- que pueden hacer que los que están de un lado, se pasen al otro.
Tal es el caso de Celestino Quijada, un hachero nacido en 1916 en la localidad de El Manso, un paraje rural del Departamento Bariloche, en la provincia argentina de Río Negro. De niño quedó huérfano y fue adoptado por una anciana que lo anotó en algún perdido registro civil del lado chileno. Con el tiempo Celestino fue y vino entre Chile y la Argentina para finalmente quedarse en cercanías de Bariloche haciendo lo que mejor podía para ganarse el pan: darle duro al hacha haciendo leña para "ganarse el mango".
Luego, entrados los años de la década del '40, -como tantos- se enamoró del Peronismo, asegurando que su líder se fhabía fijado en los que menos tenían. “Perón abrió los ojos a todos los obreros, nos empezó a cuidar”, decía Celestino. Pero esa época no sólo le abrió los ojos frente a las políticas del Justicialismo que tanto le cambiaron la vida a quienes menos tenían y a quienes más iban a necesitar, sino que fue también fue el momento en que pudo convertirse en impensado protagonista de un hecho que no olvidó nunca jamás.
Celestino Quijada, el hombre que vio a Hitler vivo en Bariloche.
Un día, Celestino se metió entre los matorrales sureños, hacha en mano disponiéndose a trabajar. Sin embargo, pese a la esperada rutina de cada día, aquella no fue -definitivamente- una jornada más. Allí había un hombre, relajado y lejos de la preocupación mundana en la que estaban sumidos todos los demás.
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Ese hombre era Adolf Hitler
"Lo vi cuando mis patrones me mandaron a cortar ramas en una maderera junto al cerro Otto (Bariloche, Argentina). Estaba sentado en una silla y lo reconocí por las fotos del diario", contó Quijada (1).
Y no fue el único en verlo: "Mi mamá nos contó en distintas oportunidades que sus padres lo habían atendido en el reservado de la estancia San Ramón, ubicada en la entrada de Bariloche." (2), recordó Víctor Luego, uno de sus conocidos también entrevistado por los curiosos periodistas que llegaron a ese mismo lugar.
El Refugio Berghof, en el Cerro Otto de Bariloche.
Es muy posible que el lugar del avistaje haya siso el Refugio Berghof, que fue la vivienda de un pionero de Bariloche y fundador del Club Andino Bariloche, Otto Meiling, un alemán de renombre en la comunidad germana local y con inocultables simpatías por el Partido Nazi. El lugar se convirtió en la primera fábrica de esquíes y primer centro de esquí de Sudamérica.
Hoy se puede estar allí viajando en automóvil, o colectivo de línea, hasta llegar el km. 5 de la Avda. de lo Pioneros, lugar donde se encuentra la estación inferior del Teleférico Cerro Otto que en pocos minutos lleva -en la actualidad- hasta su confitería giratoria superior, disfrutando en el viaje de una hermosa vista. Desde allí se desciende por el camino de autos hasta el cartel que indica la entrada al Refugio Berghof.
El nombre del lugar, rinde homenaje al refugio alpino de Adolf Hitler en Berchtesgaden. Ese lugar también se llamaba Berghof.
Celestino Quijada junto a su esposa y uno de sus hijos, fotografiados en 2015.
En 1945, Don Celestino tenía 29 jóvenes años. El 12 de abril de 2016 llegó al centenario junto a su esposa y sus hijos. Siempre, cada vez que podía, volvía a recordar ese misterioso avistaje del que nadie, bajo ninguna circunstancia, (dados los documentos que se tienen a mano) ya podrá llegar a dudar. Se llevó esa experiencia a la eternidad.
Instagram: @marcelo.garcia.escritor
Twitter: @mdGarciaOficial
Referencias:
(1): Declaración a la revista "Noticias"difundida el portal digital Perfil.com. en 2011.
(2): http://www.lagaceta.com.ar/nota/463843/mundo/vi-hitler-cuando-mis-patrones-me-mandaron-cortar-ramas.html
Nota: El artículo no expresa ideología política, solo investigación histórica.
