Quién es el hombre que asesinó a tiros a la mujer policía en el Subte C
Fue identificado como Oscar Gustavo Valdés y tiene antecedentes. Le disparó a Maribel Nélida Salazar, de 35 años, quien tenía dos hijos.
Por Canal26
Martes 14 de Febrero de 2023 - 14:18
La detención de Oscar Gustavo Valdés. Foto: captura de video.
La policía Maribel Nélida Salazar fue asesinada con dos disparos de bala en el Subte C cuando intentó frenar a un hombre que estaba increpando a un empleado del subte.
El atacante fue identificado como Oscar Gustavo Valdés.
Tiene 30 años y le disparó a Salazar en el tórax y en el cuello luego de sacarle el arma reglamentaria a la mujer policía.
Además, realizó un tercer disparo que impactó en la cintura de un operario del subte.
Ese hombre, de 50 años, permanece fuera de peligro. Sin embargo, la policía falleció minutos después de recibir los impactos de las balas.
La detención de Valdés. Vodeo: Twitter.
Las fuentes policiales indicaron que Valdéz posee antecedentes por violencia de género del año 2021, y por resistencia a la autoridad en 2020. Fue atrapado frente al hotel Sheraton cuando intentaba escapar.
Te puede interesar:
Tras el asesinato de una oficial en Retiro; otra mujer de la Policía de la Ciudad fue atacada en el subte
La policía asesinada
Maribel Salazar era parte de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires. Previamente había trabajado en la Policía Federal Argentina y era parte de la División de Subtes de las líneas C, D, E y H.
El momento de la detención. Foto: Twitter.
El próximo 19 de marzo hubiera cumplido 36 años. La mujer estaba en pareja y tenía dos hijos, uno de 13 años y el otro de 5.
Más Leídas
-
1
Una mujer le propinó una golpiza a otra en un campo de golf: "Vayan al Conurbano a tomar mate"
-
2
Robos en autopistas: alerta por dos golpes millonarios a dos automovilistas en un mismo día
-
3
Violento ataque de un hombre a su pareja: la apuñaló más de 30 veces e intentó suicidarse
-
4
El drama de Verónica Franco: un hombre con denuncias y antecedentes mató a su sobrino
-
5
A 22 años del asesinato de José Luis Cabezas: una herida que no cierra
