A lo largo de un día completo o más, los ingresantes deben completar un conjunto específico de tareas, que determinarán sus futuras oportunidades académicas y profesionales.
Por Canal26
Lunes 2 de Diciembre de 2024 - 21:06
El ingreso a una universidad suele ser un proceso bastante estresante, y las escuelas de arte de China no resultan ser la excepción. Cada año, miles de estudiantes viajan a la ciudad más cercana para realizar exámenes prácticos, parte del proceso de solicitud para ingresar a los programas de arte de la facultad.
Allí, se sientan junto a sus compañeros en amplias salas de conferencias de hoteles o instalaciones deportivas, con lápices y pinturas a cuestas. A lo largo de un día completo o más, deben completar un conjunto específico de tareas de arte, que determinarán sus futuras oportunidades académicas y profesionales.
La Academia Central de Bellas Artes administra sus exámenes cada año en cinco lugares de prueba: Chengdu, Pekín, Qingdao, Shezhen y Zhengzhou. Los estudiantes se presentan a exámenes durante dos días: seis horas para dibujo, tres horas para teoría del color y tres horas finales para bocetos.
"Es una experiencia inolvidable y no quiero volver a participar en ella", expresó Yu Lilong, estudiante de posgrado que estudia diseño creativo de productos en la Academia de Arte de China en Hangzhou.
Y describió: "Los estándares son muy profesionales y es increíblemente difícil. Cuando presenté la solicitud, tuve que hacer un dibujo al carboncillo del rostro de un hombre, una pintura a color de una naturaleza muerta con flores y frutas y un boceto".
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La Academia Central de Bellas Artes de China selecciona entre cinco y once jueces cada año antes de los exámenes para sus tres programas de arte. Antes del examen, los jueces son enviados a un lugar secreto en un hotel no revelado de Pekín.
A su llegada, se les entregan los teléfonos, las computadoras portátiles y todas las herramientas para la comunicación externa, que no serán devueltas hasta que finalice el proceso de evaluación.
Una vez finalizados los exámenes en los cinco centros de pruebas, los representantes de la universidad recogen las obras de arte de los aspirantes y les colocan un borde para ocultar las firmas o marcas que puedan identificar al artista, y les asignan un número.
A continuación, las obras de arte se colocan en maletas y se confían a una o dos personas por centro, que las trasladan en avión a Pekín y las entregan a los jueces en su hotel.
La calificación demora entre tres y cuatro días. Después, las puntuaciones se clasifican en orden numérico y los primeros mil aproximadamente son invitados a tomar otro examen, el gaokao , o Examen Nacional de Ingreso a la Educación Superior.
El gaokao tiene un formato similar y sirve como modelo original para los exámenes iniciales de las escuelas de arte. Se lleva a cabo durante dos días y dura aproximadamente nueve horas. Los individuos que no aprueban son eliminados de la competencia y, de los que aprueban, solo se otorgan ofertas a los artistas que realizaron las obras de arte con mayor puntuación.
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