La UE propuso una "pausa humanitaria" en el conflicto entre Israel y Hamas para evitar una escalada regional

Ayuda humanitaria para Gaza. Foto: EFE.

La Unión Europea (UE) alcanzó un consenso entre los países que son miembros para exigir una "pausa por razones humanitarias" de la escalada bélica entre Israel y el grupo islamista Hamas que gobierna la Franja de Gaza. El pedido de las naciones de Europa es que puedan pasar a la zona palestina los insumos como agua y comida que están mandando distintas organizaciones internacionales. 

"Hay un consenso básico para entender que una pausa por razones humanitarias sería muy necesaria para que la ayuda humanitaria pudiera entrar sin correr los riesgos que significa una acción bélica continuada", dijo Josep Borrell, alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad y vicepresidente de la Comisión Europea, en una conferencia en Luxemburgo que dieron los cancilleres de la UE al finalizar la reunión.

Josep Borrell. Foto: EFE.

El político español señaló que no es lo mismo una pausa humanitaria que un alto el fuego y que serán los dirigentes comunitarios los que fijen la postura de la Unión en su cumbre del jueves y el viernes en Bruselas. Borrell admitió que “una pausa es un objetivo menos ambicioso que un alto el fuego”, pero destacó que una pausa puede ser acordada de manera “más rápida” y que los ministros “han entendido” que es importante incluso para que la ayuda humanitaria ingrese y no sea también “víctima” de la “acción bélica”.

“Creo que nadie mejor que el pueblo judío para saber cuánto daño puede hacer un ser humano a otro. Nadie mejor que el pueblo judío, que tanta persecución ha sufrido a lo largo de los siglos, para (saber) el daño que se puede causar malignamente, buscando hacer daño y hacer sufrir a un ser humano”

Además, subrayó que “la UE no puede decretar la pausa humanitaria, la tienen que decretar las partes en conflicto”. “Creo que nadie mejor que el pueblo judío para saber cuánto daño puede hacer un ser humano a otro. Nadie mejor que el pueblo judío, que tanta persecución ha sufrido a lo largo de los siglos, para (saber) el daño que se puede causar malignamente, buscando hacer daño y hacer sufrir a un ser humano”, expresó Borrell. 

El jefe de la diplomacia europea enfatizó en el derecho de Israel a defenderse del ataque de Hamás del pasado 7 de octubre, en el que murieron 1.400 personas, pero planteó la necesidad de que el gobierno israelí respete el Derecho internacional humanitario, el cual, manifestó, prohíbe cortar el agua y la electricidad a una población. En este sentido, Borrell señaló que ésta es la quinta guerra que observa en Gaza y afirmó que escuchó muchas veces “esta vez vamos a acabar con (el movimiento islamista) Hamás; lo he escuchado demasiadas veces”.

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El objetivo de evitar una escalada regional

También destacó la necesidad de “tener en cuenta también la situación del pueblo palestino en Gaza” y se alineó con las declaraciones recientes del presidente estadounidense, Joe Biden, sobre que “es necesaria la retención en la respuesta a un ataque tan brutal como el sufrido por Israel”, que debe “hacer la guerra de acuerdo con las normas de la guerra”.

“Hacer la guerra de acuerdo con las normas de la guerra”

Otro asunto en el que los ministros acordaron, según Borrell, es en que “hay que evitar una escalada regional” que parta del enfrentamiento entre Israel y Hamás. Advirtió en ese contexto que Rusia “está tratando de sacar provecho con campañas de desinformación” e insistió en que “no hay que perder de vista” el objetivo de una solución de dos Estados al conflicto israelí-palestino, una salida de la que “llevamos 30 años hablando” y que "parece que se aleja” con la expansión de asentamientos israelíes en Cisjordania, precisó.

Ayuda humanitaria para Gaza. Foto: EFE.

En cualquier caso, enfatizó que Europa “tiene que comprometerse en lanzar un proceso político”. “Habrá que elevar el nivel de ambición, enlazar con los países árabes para ver los límites de la acción política que pueda detener la violencia”, manifestó Borrell, quien lamentó también la muerte de 30 trabajadores de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (Unrwa) por el recrudecimiento del conflicto.