Coronavirus en Venezuela: el país enfrenta avance de pandemia sin agua y sin datos

Coronavirus en Venezuela, pandemia, REUTERS.

Venezuela es uno de los países de América Latina afectado por la pandemia de coronavirus, pero su crisis política y social que lleva años sin resolverse, tiene al país carioca al borde del colapso social sin siquiera contar con servicios básicos en algunas zonas del territorio.

El país de Nicolás Maduro tiene dos grandes problemas a la hora de enfrentar el virus: controles y testeos y agua. Según datos oficiales hay más de 33.000 infectados con menos de 300 muertes. Pero muchos dudan de estas cifras.

El país no cuenta con suficiente capacidad como para seguirle el ritmo a la epidemia y el régimen de Maduro llegó a prohibió a los laboratorios privados y a las universidades realizar pruebas.

La mayoría de los tests realizados no son de tipo molecular (PCR), que son las que ofrecen una mayor precisión con respecto a infecciones activa. La última disponible de PCR indicaba que a 22 de mayo se habían hecho 16.577.

La observación del número de contagios entre las autoridades añade más dudas. Hay una decena de altos funcionarios, en algunos casos muy próximos a Maduro, que a principios de julio empezaron a anunciar que estaban infectados. Entre ellos, el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, el vicepresidente económico, Tareck El Aissami, o Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Nacional Constituyente y considerado como número dos del chavismo. A ellos se suman casi 50 trabajadores de la televisora estatal. Y el pasado jueves falleció Darío Vivas, jefe de Gobierno de Caracas, una figura importante del régimen.

El Gobierno condiciona la confirmación de muerte por COVID a que se le haya practicado la prueba PCR a la persona afectada, algo que sucede en muy pocas ocasiones por la ya referida falta de capacidad. En consecuencia, es prácticamente imposible que el número de muertes confirmadas refleje la realidad del contagio.

La imposibilidad de acceder a un servicio esencial y tan necesario como el agua impide que se pueda combatir de la mejor forma el contagio, sobretodo en zonas urbanas que están más expuestas al contagio.