Diana, la primera esposa del actual Rey Carlos III y madre de los príncipes William y Harry, dejó un gran legado como activista y parte de la realeza inglesa.
Luego de la muerte de Lady Di, la Princesa de Gales, en un accidente automovilístico en París, miles de personas se acercaron al palacio de Kensington para demostrarle su amor a la activista, filántropa y aristócrata británica, a través de cartas, flores y ofrendas.
Aquel 6 de septiembre de 1997, la Abadía de Westminster abrió sus puertas para los más de 2.000 invitados, entre ellos Margaret Thatcher, Tony Blair, Nelson Mandela y Hillary Clinton, además de figuras del arte como Tom Hanks, Donatella Versace, Tom Cruise, Luciano Pavarotti y Nicole Kidman. Sin embargo, los invitados no fueron los únicos presentes, sino también los más de dos millones de personas colmaron las calles de Reino Unido y otras más de 2.500 millones a través del televisor que fueron parte de lo que fue uno de los funerales más multitudinarios de la historia.
La despedida de Lady Di no solo se transmitió en la televisión inglesa, sino que también se retransmitió en más de 180 países y fue vista en 350 millones de hogares de todo el mundo.
Te puede interesar:
El pueblo escondido que enamoró a Lady Di y compite por ser el mejor del mundo: cuál es
Eran las 9:08 del sábado 6 de septiembre de 1997 cuando Reino Unido daba comienzo al último adiós de la reina de sus corazones. Justo en ese momento, el ataúd con los restos de Diana abandonó el Palacio de Kensington rumbo a la Abadía de Westminster escoltado por oficiales condecorados, de la guardia de Gales y de cientos de personas que no reprimían sus lágrimas.
Los escoltas tardaron solo 20 minutos en llegar al palacio real de St. James, donde sus dos hijos, su exesposo, el actual Rey Carlos, y su hermano, Carlos Spencer, la esperaban para unirse al cortejo junto a las más de 100 organizaciones de caridad que simpatizaban con Lady Di.
Una vez en la Abadía, una ceremonia conmovedora e histórica tuvo lugar. No solo su familia la homenajeó sino también Elton John, que además de ser un artista musical reconocido también era amigo personal de la princesa. Allí se generó el momento más emocionante de la despedida al entonar una versión de "Candle in the wind" adaptada para Diana que decía “adiós, rosa de Inglaterra, tal vez crezcas en nuestros corazones”.
Lo siguió el turno del hermano de Lady Di, quien subió al púlpito ante toda la familia real y las miles de personas que acudieron a la Abadía para formar parte de la despedida. Sin dudarlo, afirmó que Diana no “necesitaba títulos reales para generar un tipo de magia particular” ya quesu personalidad y cualidades bastaron para que conquistar el corazón de todo un país.
Para las 12:05 la ceremonia llegaba a su fin, con un minuto de silencio que contrastó con el aplauso espontáneo de la multitud al escuchar replicar las campanas, para así despedir a la reina que no fue.
Te puede interesar:
Lady Di y su legado en la moda: los looks más icónicos, del "vestido de la venganza" a los jeans mom
Diana había dejado de pertenecer a la familia real luego de su divorcio con el príncipe Carlos, razón por la cual la reina Isabel decidió que el funeral debía ser íntimo y familiar, algo con lo que el pueblo británico no estuvo de acuerdo.
Convencida por Tony Blair, el primer ministro laborista, Isabel optó por un funeral real. Sin embargo, esto le representó un gran problema ya que no existía un protocolo para una princesa que ya no era princesa, pero sí la madre del heredero al trono.
Así fue que la realeza se vio obligada a crear una nueva normativa para rendirle honores a Diana, de allí el término “un entierro único para una persona única”. Sin embargo, el último adiós, finalmente, fue como lo propuso la reina desde un principio: íntimo y familiar, al que solo asistieron diez personas.
A pesar de que Diana había pedido descansar en la iglesia de Great Brighton, junto a su padre y las veinte generaciones de la familia Spencer, sus restos fueron llevados a las Althorp, en una isla del lago Round Oval, por decisión de su familia.
1
Preludio de la Tercera Guerra Mundial
2
Rusia y Ucrania: entender la guerra desde la historia
3
Una mujer, un baile y el misterio de una bala en el pulmón de Carlos Gardel
4
Francisco es el Papa Negro, según la profecía de Nostradamus
5
La imposible relación entre San Martín y su suegra: ella lo odiaba y lo llamaba de la peor forma