Murió la última tortuga hembra de caparazón blando e investigan las causas

Tortuga de caparazón blando. Foto Reuters.

Según la agencia de noticias estatal China News Service, Xiangxiang, una tortuga de más de 90 años, falleció el sábado después de un intento de inseminación artificial, realizado sin problemas tras un examen médico que había determinado que su estado de salud era bueno.

La hembra que murió medía alrededor de 156 centímetros de largo y pesaba 93 kilos.

La criatura se encontró flotando, inmóvil en la orilla de el lago Dong Mo, ubicado en la capital vietnamita de Hanói. "Es un duro golpe", dijo hace pocos días Tim McCormack, director del Programa de Tortugas Asiáticas para la Conservación de Indo-Myanmar, quien desde el 2019 realizó seguimiento del ejemplar. Todavía se desconoce la causa de su muerte ocurrida a fines del mes de abril.

Son consideradas símbolo de la lucha por la independencia de Vietnam. 

Investigan las causas. Foto: EFE.

Ahora solo existen otros dos ejemplares en el mundo, pero ambos son machos: uno se encuentra en un zoológico en China y otro en el lago vietnamita de Xuan Khanh. Los residentes locales y científicos temen que este sea el fin de la especie de tortugas de caparazón blando.

La criatura se encontró flotando, inmóvil en la orilla de el lago Dong Mo, ubicado en la capital vietnamita de Hanói.

Para los especialistas, la extinción de estos reptiles es culpa de la intervención del hombre en la naturaleza: "La caza para el consumo de su carne y la pérdida de hábitat han hecho que queden muy pocos ejemplares", explicó el líder del programa de conservación de estas criatura.

Las tortugas de caparazón blando, cuyo nombre científico es Rafetus swinhoei, son difíciles de localizar, ya que pasan mucho tiempo sumergidas para cazar alimentos.

La hembra que murió medía alrededor de 156 centímetros de largo y pesaba 93 kilos. Estos animales, llegan a pesar 150 kilos y además, son carnívoros. 

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Criaturas veneradas

La primera vez que estos animales fueron registrados en Vietnam fue en 2007, cuando se descubrió que un macho vivía en el lago Hoan Kiem en la capital. Desde entonces, estas criaturas fueron veneradas por habitar el lago mas famoso de la región. Además, son consideradas símbolo de la lucha por la independencia de Vietnam. 

Un miembro de una organización de bienestar animal sostiene una tortuga de caparazón blando. Reuters

Los habitantes de la zona apodaron al reptil como "Cu Rua" que significa "bisabuelo tortuga" en vietnamita. Los lugareños consideraron un mal augurio su muerte y hoy, los restos de la tortuga se conservan disecados en un museo de la ciudad.

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¿Todavía hay esperanzas?

En 2019, la última hembra de tortuga gigante de caparazón blando que se creía que existía en ese entonces, murió luego de un intento infructuoso de inseminación artificial en China. Sin embargo, la esperanzas para el futuro del animal renacieron cuando se supo que existía otra en Vietnam.

Ahora, tras la muerte de la que en la actualidad se conoce como la última hembra, los científicos temen que sea el punto final de la especie.

Hasta el momento no se conoce de otro ejemplar que pueda reproducirse con los únicos dos machos existente."Era una hembra grande que obviamente tiene una gran capacidad reproductiva. Podría haber puesto potencialmente cien huevos o más al año", lamentó Tim McCormack, director del Programa de Tortugas Asiáticas para la Conservación de Indo-Myanmar.