Comenzó bailando en los clubes durante su adolescencia y viajando a fiestas por Europa, y terminó frente a las bandejas en mega fiestas. El interesante recorrido de la dj y productora que llevó el techno al mainstream y se convirtió en una de las artistas más reclamadas en el line-up de los grandes festivales del mundo.
A los 15 años Amelie Lens se sumergió en la música electrónica y su vida diaria era levantarse y dormirse escuchando techno. Rápidamente se enamoró de las fiestas, y para evitar que no la dejen pasar a los clubes por su edad, se ocupaba de escribirles a los djs para que anoten su nombre en la lista de invitados.
Como la mayoría de sus amigos no compartían la pasión que ella tenía por la escena musical de los clubes, generalmente iba sola a las fiestas. Su confianza se desarrolló en las discotecas. En las pistas de baile llenas de gente, era recibida por otro tipo de familia, en un ambiente era libre de juicios. El hecho de estar sola no era incómodo por el aire de comunidad que se respiraba en las fiestas.
Además de ser habitué de los clubes de Bélgica, Amelie también coleccionaba música. Su gusto de no estaba limitado al techno y era abierta a otros estilos. Esto es algo que de alguna manera más tarde desarrollaría su carácter ecléctico, y no tan ajustado al estilo duro y rápido del techno más convencional.
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Para algunos oyentes, su estilo poco tradicional fue una razón para criticar y polemizar, sin embargo, el interés de Amelie nunca estuvo atado a los oídos de los más conservadores. Además, ella misma es consciente de su criterio y gusto orientado a hacer techno duro, pero positivo. Mantenerse en el estilo sin caer en lo oscuro y opresivo.
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La dj belga nunca quiso estar en el underground como dj, en términos de sonidos. Si embargo la juzgan, “ya no estás en el underground”, mientras que la artista piensa: “¿Alguna vez fui parte?”. Si bien Amelie fue parte del público de este tipo de fiestas reducidas a un pequeño público, al imaginarse como dj, confiesa que siempre se vio en los escenarios de los festivales, tocando energéticamente y para miles de personas.
"En los clubes pequeños, conoces a toda la gente que te rodea. Experimentas la misma historia desde el principio, todos juntos. Realmente disfruté de esto. Pero cuando comencé a tocar la música que quería tocar, supe realmente que no encajaría en ese ambiente”.
Más allá del gran crecimiento que la artista consiguió en el ambiente de la música electrónica, su fama no generó distancia entre sus fans y ella. Además de mantenerse estrechamente amigable con su público y aceptar cada una de las fotos que le piden, se mantiene a tono yendo a fiestas y viviendo los conciertos desde otro lado. Algo que la hace peculiar como dj y, como ella cuenta, una manera que tiene de sentir de nuevamente la vibra de estar en el lugar en el que empezó todo cuando era solo una adolescente.
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