Estados Unidos descarta catalogar el fentanilo como un arma de destrucción masiva

Fentanilo, droga. Foto: Reuters

El Gobierno de Estados Unidos descartó el pedido de representantes republicanos de catalogar el fentanilo como un arma de destrucción masiva, ya que aseguran contar con las "herramientas necesarias" para combatir el opioide sintético.

"Por ahora no vemos que catalogar el fentanilo como arma de destrucción masiva nos dé ninguna competencia que no tengamos", dijo en una llamada con periodistas Todd Robinson, encargado de la oficina antinarcóticos del Departamento de Estado.

Robinson aseguró que tanto los Departamentos de Estado y de Justicia, así como la agencia estadounidense antidrogas (DEA, por sus siglas en inglés), ya cuentan con "las herramientas necesarias para perseguir a las redes que trafican con esa droga".

Todd Robinson, encargado de la oficina antinarcóticos del Departamento de Estado. Foto: Reuters.

Algunos fiscales de estados gobernados por republicanos, como Florida, le exigieron al presidente Joe Biden que catalogue el fentanilo como arma de destrucción masiva a fin de destinar más recursos y una mayor coordinación para combatirlo.

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Coalición global contra el tráfico de fentanilo

Estados Unidos lanzó el viernes pasado una coalición global contra el tráfico de fentanilo y otras drogas sintéticas con más de 80 países, entre ellos México. En este sentido, Robinson recalcó la cooperación entre ambas naciones a pesar de que el presidente Andrés Manuel López Obrador, puso en cuestión que en su país se fabrique esa droga.

El funcionario aseguró que ambos países tienen una "relación excelente" y que están trabajando para "incrementar" la cooperación en ambos lados de la frontera común. "Estoy muy orgulloso de nuestros contrapartes de México", subrayó Robinson, quien destacó además que el país latinoamericano "ha reconocido" que también sufre la "propagación" del fentanilo.

En cambio, Robinson opinó que China, país que no se ha sumado a la coalición, "podría hacer mucho más" a la hora de monitorear y compartir información sobre los precursores. "Todos sabemos que allí hay empresas que juegan un papel muy importante en la distribución de los químicos que se usan para fabricar estas drogas", afirmó.