Tercera dosis: por qué se dará la AstraZeneca y a partir de los 50 años

Reuters.

Argentina comenzará a aplicar a partir de diciembre una tercera dosis de vacunas contra el covid-19 a personas mayores de 50 años y a pacientes inmunodeprimidos, anunció este martes la ministra de Salud Carla Vizzotti en conferencia de prensa.

"A partir de diciembre se va a empezar con el refuerzo. Vamos a comenzar por el personal de salud y a avanzar escalonadamente como fuimos avanzando con nuestra campaña de vacunación", indicó la ministra, al precisar que la tercera dosis estará destinada a quienes recibieron la vacuna del laboratorio chino Sinopharm. En Argentina se aplican también la Sputnik V, la AstraZéneca, la Moderna y la Pfizer.

La Organización Mundial de la Salud había emitido la recomendación de complementar con una tercera dosis las vacunas "a virus inactivado" (una expresión típica en el sector) administradas a mayores de 60 años.

Clarín realizó una consulta sobre este anuncio y habló, entre otros, con Jorge Geffner respetado experto en inmunología, investigador Superior del INBIRS-Conicet y expresó: “Las vacunas a virus inactivado están un escaloncito atrás en cuanto al nivel de anticuerpos que generan, y ese nivel se toma como marcador subrogante del grado de eficacia. Si la persona no padece comorbilidades, de por sí tiene bajas posibilidades de tener la infección severa por Covid y deben tener dosis suficientes. Si suman más gente, mejor”.

Por otro lado Ricardo Rüttimann, infectólogo de la Fundación Centro de Estudios Infectológicos (Funcei) y miembro de la Comisión Nacional de Inmunizaciones (CoNaIn), dijo: “¿Por qué bajamos de 60 a 50? Porque en Argentina, en el pico del brote de mayo vimos una mayor carga de enfermedad y mortalidad en mayores de 50 años. Esto es independiente del tipo de vacuna que habían recibido, pero decidimos tenerlos como 'grupo particular'”.

Es la razón por la que se viene priorizando la vacunación de los adultos mayores, solo que la debilidad de ese segmento, frente a algunas infecciones virales particulares (dijo Rüttimann) podría arrancar "más temprano".

Vizzotti aclaró que los mayores de 50 años que habían recibido Sinopharm serán inmunizados con una tercera dosis de AstraZeneca. Pero Geffner negó que se esté apelando a una lógica de “superación”, es decir, administrar refuerzos y terceras dosis con vacunas “mejores” que las recibidas en los distintos esquemas iniciales y comentó: “Sinopharm, que es una vacuna inactivada, anda muy bien en combinación con otras plataformas, sea adenovirus, como Oxford AstraZeneca o mismo Sputnik, o las ARN mensajero, como Pfizer y Moderna”.

Rüttimann dijo que no se puede adelantar qué le deparará al resto de la población, ya que “se va a definir en base a la disponibilidad de vacunas y si se reciben vacunas para esquemas heterólogos, serán heterólogos; si se reciben para homólogos, serán homólogos y si bien es probable que el esquema heterólogo sea un poco más ventajoso para huéspedes sanos, para inmunocomprometidos no sabe si hay diferencia”.

Pese a la disminución de casos de covid en las últimas semanas, la ministra subrayó que hubo un aumento en menores de 18 años, que las infecciones "pasaron de ser del 8% o 9% al 20% o 25%".

"Por eso es importante avanzar con la vacunación en niños. Las vacunas están disponibles", remarcó.

Según el ministerio de Salud, un total de 25,46 millones de personas han recibido el esquema completo de vacunación, esto es el 57% de la población de 45 millones de habitantes, mientras 33,15 millones (73%) han recibido al menos una dosis.

Para cerrar, Geffner dijo que que todos tarde o temprano deberán recibir el suyo: “La pregunta es cada cuánto. Si ocho, nueve, diez o doce meses. Entre fines de este año y 2022 vamos a tener que avanzar con una dosis de refuerzo para el conjunto de la población. Salvo los chiquitos: sabemos que hacen muy buena respuesta inmunológica. Quizás a ellos les dure más. Todavía no lo sabemos”.