Paren el mundo, Mafalda está de fiesta: se cumplen 59 años de su primera aparición

Mafalda, personaje

Todos, o por lo menos la gran mayoría, saben quién es Mafalda, aquella niña plasmada en una historieta que se convirtió en una adelantada para su época abordando temas como el feminismo, la inflación y otras cuestiones que aún persisten. Lo que quizás muchos no sepan es que esa niña este 29 de septiembre está cumpliendo 59 años.

Mafalda es una niña tan inteligente como crítica, preocupada por el planeta y las circunstancias socio-política que la aquejan. Pero ella no estaba sola, sino que la acompañaban su padre, su madre Raquel, sus amigos Felipe, Miguel (más conocido como Miguelito) Pitti, y su amiga Libertad. Pero como todos, Mafalda también tenía una amiga que representaba todo lo que ella cuestionaba, y esta era Susanita.

Historieta de Mafalda. Foto: Archivo

Volviendo a su cumpleaños, hay fechas que son importantes aclarar. Pero Quino, su padre artístico, fue quien se encargó de despejar estas dudas afirmando que su nacimiento fue el 29 de septiembre de 1964, cuando el personaje apareció por primera vez en la revista Primera Plana, y no el 15 de marzo de 1966, cuando la historieta tuvo por primera vez una tirada propia en el diario El Mundo.

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La primera aparición de Mafalda

Aquel martes 29 de septiembre de 1964 en los puestos de diarios y revistas se encontraba una que se convertiría en el inicio de de un fenómeno que atravesó generaciones. Entre esas revistas había una muy especial, la “Primera Plana” que le abrió las puertas a uno de los personajes de historietas más icónicos del país.

Ese día apareció por primera vez Mafalda, aquella niña que con el tiempo se convertiría en el espejo de la clase media argentina y de la juventud progresista que afloraba en ese entonces, ocupando la página 22 y la 64 de la revista junto a su padre con quien mantiene un diálogo que nunca podrá ser olvidado.

Primera aparición de Mafalda en la Revista Primera Plana. Foto: Archivo

En la primera aparición Mafalda le pregunta a su papá si se consideraba buen padre, a lo que él le responde que cree que sí. No contenta con la respuesta, la niña vuelve a insistir en el tema y le pregunta si es “el más, más, más, más bueno de todos, todos los papás del mundo”. Su padre le responde que quizás exista alguno más bueno que él, respuesta que provocó el enojo de Mafalda que se va del lugar gritando: “¡Lo suponía!”.

Su aparición en la página 64 de la revista, a diferencia de la primera, tuvo menos diálogo pero eso no impidió que la niña pusiera en claro sus ideas. En esta ocasión, se la ve a Mafalda, muy concentrada, dibujando una casa hasta que la punta de su lápiz se rompe justo en el momento en que la estaba por terminar. Otra vez las emociones se apoderan de ella y grita: “¡Estas cosas ocurren solamente en este país!”.

A partir de entonces, este personaje de pelo corto, que en un principio fue pensada para una campaña de electrodomésticos que nunca se lanzó, a la que le preocupaba los temas humanos universales pero, sobre todo, las injusticias, se convirtió en un personaje icónico, tan irreverente como entrañable.

Mafalda. Foto: Archivo

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Quino, el gran creador

Para el año 1963, Joaquín Salvador Lavado Tejón, al que muchos conocen como Quino, antes de la aparición de Mafalda llevaba años realizando humor gráfico cuando su amigo Miguel Brascó, también humorista y escritor le comentó que había una empresa de electrodomésticos de la marca “Mansfield”, que buscaba realizar una publicidad encubierta ya que Quino “tenía ganas de dibujar una tira con chicos”.

La condición era que los nombres de los personajes comenzara con la letra M. Fue entonces cuando Quino dibujó varias tiras protagonizadas por familias tipo: un matrimonio de clase media y dos hijos, un niño y una niña, que no tendría mucha relevancia a la que llamaría Mafalda. Finalmente, la publicidad nunca vio la luz, pero el personaje de la niña no salió de la cabeza de su creador.

Mafalda junto a su padre artístico, Quino. Foto: Argentina.gob

Un año después, en 1964, la Revista Primera Plana le pidió al padre artístico de Mafalda una colaboración que no cayera en la típica página de humor, sino que buscaban algo nuevo. Así fue como Quino llevó a la niña de pelo corto con el fin de contar la historia de ella y de sus padres. Con el pasar del tiempo y la publicación de varias tiras, el autor decidió incorporar a los demás personajes que también lograron su reconocimiento con el tiempo, fue así como nacieron Felipe, Manolito, Susanita, Miguelito, Guille y Libertad, quienes se convirtieron en grandes compañeros de Mafalda.

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Popularidad internacional

Los libros en las que se manifestaban las denuncias de esta niña que siempre pregonaba la paz mundial, protestaba contra el hambre de su país y buscaba crear conciencia social en sus pares como Susanita, Manolito y Felipe, llegaron a traducirse en más de 26 idiomas, incluido el Braille, y solo en Argentina se vendieron más de 20 millones de ejemplares.

Tal fue el alcance de este personaje que llegó a tener su estatua no solo en el barrio porteño de San Telmo, donde vivió su creador, sino también en España. Además, sus libros se vendieron en Francia, Italia, Portugal, Brasil, Grecia, Finlandia, Alemania y Estados Unidos, entre otros.

Una de las frases más recordadas de este personaje de historietas. Foto: Instagram/@mafaldadigital 

“¿Qué importan los años? Lo que realmente importa es comprobar que a fin de cuentas la mejor edad de la vida es estar vivo”, reza una de las icónicas frases de una niña en estos 59 años logró conquistar el corazón de grandes y chicos de todo el mundo.