Acto en el Palacio de Justicia a 40 años de la gesta de Malvinas

Miguel Valdez, Ricardo Dearti, Américo Castellón, Alicio Aguirrez, Martín Balza, Horacio Rosatti, Julio Piumato y Maia Volcovinsky.

El presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Horacio Rosatti, participó este martes del acto organizado por la Unión de Empleados de Justicia de la Nación (UEJN) en la planta baja del Palacio de Tribunales para homenajear a los caídos y veteranos de la Guerra de Malvinas, en vísperas del 40° aniversario del desembarco de las tropas argentinas en las islas, que se iniciara el 2 de abril de 1982.

Con la presencia del teniente general Martín Balza, veterano de Malvinas y exjefe del Estado Mayor del Ejército, y de excombatientes que integran o integraron las filas del Poder Judicial, Rosatti destacó que la recuperación del archipiélago, sustentada en argumentos históricos, geográficos y jurídicos, “debe ser un cometido permanente de los tres poderes del Estado”, en línea con el mandato constitucional expresado en una de las claúsulas transitorias que se incorporaron en 1994 con la reforma de la Constitución Nacional.

Horacio Rosatti y Martín Balza, en el salón de los Pasos Perdidos.

Además, transmitió la gratitud y el reconocimiento del Máximo Tribunal hacia los héroes de Malvinas, el respetuoso homenaje a quienes perdieron la vida en combate y el compromiso de continuar conmemorando año tras año esta gesta, hasta que se concrete el anhelo de recuperar la plena soberanía territorial.

Balza, por su parte, pidió una oración en memoria de los soldados fallecidos y subrayó la importancia de sostener la reivindicación de soberanía por la vía diplomática. “La violencia nunca va a ser la solución”, sostuvo, al tiempo que hizo un llamado a “exaltar la paz” y dijo que “un pueblo unido, sin grietas ni zanjas” es condición para que el reclamo prospere en el futuro.

Julio Piumato, Martín Balza y Horacio Rosatti.

Asimismo, al recordar el conflicto armado, reflexionó: “Fue una causa justa en manos bastardas: una dictadura cívico-militar que se caía a pedazos, desprestigiada en el mundo por las violaciones a los derechos humanos, jugó con eso para intentar prolongar su permanencia”.

Antes, el secretario general de la UEJN, Julio Piumato, había remarcado el valor, el orgullo y el coraje de quienes lucharon valientemente en la guerra; y la permanente tarea de difusión y sensibilización que las asociaciones de excombatientes llevan a cabo en todo el país.

El dirigente resaltó también el proyecto que el gremio impulsa junto con la CGT y la Federación Nacional de Veteranos de Guerra para que los contenidos pedagógicos sobre la cuestión de Malvinas “vuelvan a ser parte de la currícula en todas las instancias educativas de Argentina”.

Magistrados/as, funcionarios/as y representantes de los/as trabajadores/as judiciales, junto con familiares y allegados de excombatientes participaron del acto. Entre ellos: Alicio Aguirrez, delegado de la UEJN y empleado de la Cámara Federal de Apelaciones de Posadas, Medalla de Honor al Valor en Combate, quien luchó en el Batallón de Infantería de Marina 5 (BIM 5) con el cual el 14 de junio de 1982 resistieron en uno de los combates más duros del conflicto hasta quedarse sin municiones y sin rendirse ante el enemigo; Américo Castellón, judicial en el sector Intendencia de la Cámara Federal de Casación Penal; Ricardo Dearti, presidente de la Comisión de Veteranos de Guerra de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, y Miguel Valdez, secretario de dicha Comisión.

También estuvieron los excombatientes Ramón López, Juan Carlos Sosa y Sergio Rodríguez Saa, integrantes de la Federación Nacional de Veteranos de Guerra de la República Argentina.

Durante el acto se realizó un minuto de silencio y se colocó una ofrenda floral frente a la placa que evoca a los caídos en el enfrentamiento bélico.