Una enfermedad que se hace presente con mayor frecuencia en pacientes con sobrepeso, obesidad y diabetes tipo 2. ¿Cómo se detecta?
Por Canal26
Martes 21 de Mayo de 2024 - 08:05
El hígado graso no alcohólico (HGNA) se presenta en el 25% de la población global y prevalece en pacientes con sobrepeso, obesidad y diabetes tipo 2. En general, es una afección silenciosa que no da señales, pero si presentan síntomas, puede sentirse cansado o tener molestias en el lado superior derecho del abdomen.
"La prevalencia de hígado graso no alcohólico alcanza proporciones epidémicas y aproximadamente entre el 20 y 30% de los adultos de la población general la padecen. Esta cifra aumenta entre un 70 y 90% en aquellos individuos con obesidad o diabetes", resalta la Fundación Favaloro.
Te puede interesar:
¿Cómo limpiar el hígado graso?: estos tres jugos de origen natural pueden ser de gran ayuda
El diagnóstico se realiza a través de una ecografía, pruebas de laboratorio hepático o biopsia hepática. El primer método permite descifrar el grado de "infiltración grasa en el hígado", como así también saber si hay otro tipo de daño.
"Las pruebas de función hepática pueden no estar alteradas aún en presencia de infiltración grasa del hígado, pero en general están elevadas dos o tres veces los valores normales y se asocian a aumentos en los valores de glucosa, colesterol y triglicéridos en sangre", explica la fundación.
Además, subrayan que al estar elevadas es importante descartar otro tipo de hepatopatías, como hepatitis B y C. Por su parte, la biopsia hepática brinda un diagnóstico definitivo, es aplicable en casos de desarrollo de hepatopatía progresiva.
Te puede interesar:
Hígado graso: ¿cuáles son las cinco frutas que recomiendan consumir para combatir esta enfermedad?
Si bien el hígado graso no alcohólico es un trastorno metabólico, se recomienda evitar el consumo de alcohol y de medicamentos potencialmente hepatotóxicos. Además, es importante controlar las enfermedades asociadas a la afección, como la diabetes, dislipemias y sobrepeso.
Cabe resaltar que no hay ningún tratamiento definitivo para la enfermedad, pero se recomienda hacer actividad física y reducir el peso corporal.
Te puede interesar:
Hígado graso: ¿por qué aumentó su incidencia en los niños?
Aunque no existan los alimentos milagrosos, hay una fruta que es reconocida por sus componentes y por ser rica en nutrientes. Se trata del tamarindo, originaria de África, pero también se la encuentra en India y Pakistán.
Esta fruta se destaca por tener un alto contenido en nutrientes y vitaminas C, K, B, calcio, potasio y fósforo. Según un artículo publicado en WebMD, tiene efectos laxantes que combaten ciertos hongos y bacterias.
"Contiene polifenoles como los flavonoides, algunos de los cuales pueden ayudar a regular los niveles de colesterol", señala la revista Healthline. Su concentración de antioxidantes ayuda a la protección de las células del hígado. Además, combate la retención de líquidos porque tiene potasio, un mineral importante en la prevención.
1
Chau pesas: los 3 ejercicios claves para tonificar los brazos a partir de los 60 años
2
Flexiones de brazos: cuántas hay que hacer por día para fortalecer los músculos del pecho
3
Recuperar la flexibilidad después de los 40: cuatro ejercicios básicos para elongar músculos y articulaciones
4
Adaptarse al calor: los ejercicios ideales para que las personas mayores se mantengan en actividad durante el verano
5
Rico y saludable: el superalimento que fortalece los huesos y ayuda a bajar de peso