Las víctimas de los incendios de dos discotecas en España piden justicia un año después

Por Canal26

Lunes 30 de Septiembre de 2024 - 04:55

Virginia Vadillo

Murcia (España), 30 sep (EFE).- Un año después del incendio que arrasó dos discotecas en la ciudad Murcia (sureste) y que costó la vida a trece personas de origen colombiano, ecuatoriano y nicaragüense, los familiares de los fallecidos y los supervivientes claman por mantener viva la memoria y por que se haga justicia.

“Nos quitaron a nuestros seres queridos, nada nos los va a devolver, pero sí esperamos que se haga justicia. Que los responsables salgan y paguen por ello (...) y que se tomen medidas para que una tragedia así no vuelva a ocurrir", declaró a EFE Kely Gómez, que perdió en el incendio a su hermano Kevin.

Lo mismo sienten la mayoría de las víctimas de ese incendio, ocurrido en la madrugada del 1 de octubre de 2023 en una zona de ocio, y que afectó a dos discotecas contiguas.

Un proceso judicial “demasiado lento”

Kely Gómez voló desde su Colombia natal hasta Murcia para corroborar el fallecimiento de su hermano, y ese pasaje de avión, asegura, es la única ayuda que recibió de las administraciones desde que ocurrió la desgracia.

Desde entonces, siente que las víctimas están “luchando solas” en un procedimiento judicial cuya instrucción acaba de ser prorrogada medio año, un proceso “demasiado lento”.

“Una siente ansiedad, tristeza, y también cierta decepción al ver que los responsables de las salas y la administración tratan de eludir su responsabilidad. Eso es lo más doloroso cuando hay pruebas tan evidentes”, lamenta.

Se refiere a los informes de policía, bomberos y peritos que apuntan a que el siniestro se originó por el uso negligente de una máquina de fuegos fríos, y que acabó con el trágico desenlace por una larga lista de incumplimientos de la medidas de seguridad de las salas, que estaban abiertas pese a una orden de cese de actividad del Ayuntamiento desde dos años antes del incendio. 

"No han expresado una palabra de perdón"

Para Jairo Correa, esa falta de asunción de responsabilidades va más allá. “Para las familias es triste, es complicado, es ofensivo e inhumano, que quienes fueron culpables no hayan expresado siquiera una palabra de perdón, un arrepentimiento”, señaló a EFE.

Su hija, Leidy Paola, pareja de Kevin, envió la madrugada de aquel trágico domingo un desgarrador mensaje de audio a su madre para despedirse de ella.

“Es como haber muerto con ella, es una tristeza que no para”, resume el padre, y explica que cuando escuchó el mensaje se prometió que “movería lo que fuera, que no abandonaría jamás esta tarea de que se haga justicia”.

“Sabemos que todos los procesos son lentos, pero un año después la herida todavía está en vivo”, cuenta Ferney Lozano, que sobrevivió al incendio, pero perdió a su mujer, Olga Lucrecia Nieto. Ambos trabajaban en el local, pero sin contrato.

Tanto su hija, de 17 años en el momento de la tragedia, como él, siguen en tratamiento psicológico y echan en falta que no se haya ofrecido ninguna ayuda en ese plano a los afectados.

"Nadie nos ha contactado".

Es el caso de Valeria Ceballos, que además de atención psicológica y psiquiátrica, ha tenido que recibir medicación para conciliar el sueño: ella fue la última persona que salió con vida de Fonda Milagros la noche del incendio.

“Todo fue bastante caótico (...), toda la atención se centró en las familias de los fallecidos, pero en todo este año nadie nos ha contactado para darnos ningún apoyo. Creo que ni siquiera se enteraron de que existimos”, lamenta.

Su amigo Efrain Montiel, que también sobrevivió, cree que hubo un avance en materia de controles e inspecciones desde el incendio, aunque piensa que aún queda mucho por recorrer. Su mujer, que también estaba en una de las discotecas, y él siguen en tratamiento psicológico.

No obstante, se siente afortunado: sabe que muchos de los afectados ni siquiera son capaces de hablar de lo que pasó.

Las víctimas se concentran este lunes ante el Ayuntamiento de Murcia para trasladar este sentir de “abandono de las administraciones” y la falta de depuración de responsabilidades. EFE

vv/cc/mcm/ma/rml

(foto)(vídeo)