Santiago del Estero: un tesoro escondido que se convierte en el destino ideal para pasar el fin de semana

Villa La Punta, Santiago del Estero. Foto: Télam/ Emilio Rapetti.

Santiago del Estero es el hogar de un tesoro escondido, dueño de un exuberante paisaje verde, clima agradable y pintorescas serranías, es decir, terrenos cruzados por montañas y sierras, ubicado a unos 92 kilómetros de la ciudad capital.

Se trata de un pequeño pueblo ubicado en la ladera oriental de las sierras de Guasayán, departamento Choya, llamado Villa La Punta que gracias a su belleza natural y la tranquilidad que lo caracteriza se convierte en un destino turístico alternativo para pasar el fin de semana o un par de días más.

Villa La Punta, Santiago del Estero. Foto: Télam/ Emilio Rapetti.

Las sierras que se encuentran en este lugar tienen una extensión de 75 kilómetros. Según los especialistas, su historia geológica es tan antigua que los recursos culturales están conformados por yacimientos arqueológicos que demuestran que aquel lugar es habitado desde tiempos prehispánicos. 

Las quebradas más próximas a Villa La Punta para visitar son: la Quebrada de La Chilca, Quebrada de Calapuchín, Quebrada de Pérez y Pozo de Leiva, donde se pueden realizar actividades como el senderismo y el mountain bike, además de un paseo interesante en familia que lleva al Cerro de la Cruz.

Villa La Punta, Santiago del Estero. Foto: Télam/ Emilio Rapetti.

Te puede interesar:

Vacaciones 2025: cuánto sale alquilar una semana en Brasil, Mar del Plata y Bariloche

¿Qué actividades se pueden realizar en Villa La Punta?

Además de admirar los paisajes compuestos por una belleza natural única, los turistas pueden realizar diversos paseos por Villa La Punta y los cerros a través del senderismo, el mountain bike y trekking, además de las cabalgatas y paseos en bicicleta que ofrece la hostería del pueblo.

Villa La Punta está construido alrededor de la plaza 27 de Abril, cuya arquitectura se roba la atención con sus casas bajas y construcciones antiguas, además de la parroquia del lugar que se construyó en piedra en 1860 en homenaje a la Virgen del Carmen, patrona de la Villa, parroquia que debió ser reemplazada en 1944 por un templo nuevo.