Ya sea para un paseo de un día o un fin de semana, este lugar invita a desconectar, relajarse y disfrutar de una experiencia única en un rincón que aún conserva muchos detalles tradicionales.
Por Canal26
Sábado 2 de Noviembre de 2024 - 10:00
A tan solo dos horas de Buenos Aires, en el partido de Suipacha, se encuentra un pequeño pueblo que parece congelado en el tiempo. Con una población de apenas 500 habitantes, esta villa rural es una excelente alternativa para quienes buscan una escapada tranquila lejos de la ciudad.
Se trata de General Rivas, una localidad que ofrece una combinación de historia, tradición y naturaleza que convierte al lugar en un destino cautivador. Ubicado a 152 kilómetros del Obelisco, es ideal para una visita de un día o un fin de semana completo, especialmente para descansar y conectar con la vida rural.
Con su clima de serenidad, los turistas pueden recorrer sus calles y disfrutar de sus puntos más emblemáticos, entre los que destaca la Capilla San Roque. Esta capilla, construida en 1898 con su fachada de ladrillo rojo inalterable, es el edificio más alto del pueblo y una de las insignias del lugar.
La antigua estación de ferrocarril es uno de los primeros puntos que captan la atención de los visitantes, mientras que el Parque de Rivas exhibe objetos y recuerdos que permiten conocer un poco más sobre la historia local. Además, el Paseo Islas Malvinas rinde homenaje a los excombatientes.
La huerta agroecológica Yerba Suelta, a las afueras del pueblo, es otro de los sitios más visitados. En este espacio, se cultiva una amplia variedad de vegetales, hierbas aromáticas y frutales bajo prácticas sustentables. Los turistas pueden recorrer las plantaciones, visitar el invernadero y adquirir productos frescos y elaborados en el lugar como conservas, dulces y licores, hechos con técnicas tradicionales.
La fecha exacta de fundación de General Rivas no está registrada, pero los historiadores estiman que hacia 1875 ya se había iniciado un pequeño caserío en torno a la estancia "La Castilla", perteneciente a la familia de Maximina Martínez. Años después, el coronel Ignacio Rivas, veterano de la Batalla de Caseros y figura histórica del país, fue el nombre que dio identidad a este pueblo en desarrollo.
Durante los días agradables y la temporada veraniega, el pueblo realiza diversas actividades como desfiles, espectáculos de música en vivo, ferias artesanales y un ambiente festivo que une a los residentes y turistas por igual.
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