Horror en La Plata: tocaron la puerta, atendió y lo mataron de un disparo en la cara

Un hombre de 34 años fue asesinado de un disparo en el rostro cuando atendió la puerta en la casa de sus padres en la localidad bonaerense de City Bell, donde se encontraba junto a su pequeña hija, por lo que la Justicia investiga el hecho.

El crimen se produjo en la madrugada del domingo cuando la víctima identificada como Leonardo Bob, de 34 años, fue a atender la puerta de la vivienda situada en 26 entre 480 y 481, de esa localidad del partido de La Plata.

Bob ya no vivía en la casa que pertenece a su familia desde hace cuatro décadas, pero había acudido a pasar unos días con sus padres, junto a su pequeña hija de tres años, con la que dormía en el momento en el que golpearon a la puerta.

Según pudo reconstruir la Policía, apenas Bob se asomó desde la reja que se encuentra a pocos centímetros de la puerta de la casa, alguien le disparó en el rostro y cayó gravemente herido, mientras que el agresor escapó.

De acuerdo a información revelada por un diario local, fue recién entonces, con el sonido del disparo, cuando los padres del herido se despertaron ante el alboroto por los ladridos de los perros de las casas linderas.

Con una herida de arma de fuego a la altura de un ojo, el hombre fue llevado al Hospital Gonnet, donde fue operado.

A pesar del esfuerzo de los médicos de guardia, al paciente se le decretó muerte cerebral y se produjo el deceso definitivo cerca de las 17:00 del domingo.

Este lunes no había pistas en torno al crimen, aunque trascendió que cobraba fuerza la hipótesis de una venganza personal.

En tanto, tomó intervención el fiscal Juan Cruz Condomí Alcorta, que está a cargo de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) número 16, del Departamento Judicial de La Plata.

Condomí Alcorta caratuló el caso como "homicidio agravado por empleo de arma de fuego" y ordenó una serie de pericias, además de que se tomen declaraciones testimoniales.

Según trascendió, las primeras evidencias arrojan, entre otros resultados, que el autor del crimen usó un arma de calibre pequeño.