Incendios en Corrientes: el gobernador Valdés pidió ayuda de Estados Unidos para combatir el fuego

Gustavo Valdés, NA

El gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, expandió en las últimas horas sus pedidos de ayuda porque los incendios en la provincia no cesan.

Tras el intercambio con Nación, Valdés extendió sus pedidos a Brasil, que envió un primer cargamento con recursos, y a los Estados Unidos.

El mandatario correntino apeló al trabajo del embajador estadounidense en la Argentina, Mark Stanley, a quien le solicitó su colaboración.

Desde su cuenta de Twitter, el jefe provincial pidió: "Puesto que #Corrientes necesita de más recursos para superar la Emergencia Ígnea que atraviesa, solicité la colaboración de #EstadosUnidos a través de su embajador en #Argentina, Marc Stanley".

En torno a su relación con el Gobierno Nacional, más específicamente con el Ministerio de Ambiente, al mando de Juan Cabandié, el gobernador correntino prefirió evitar la polémica, pero aseguró que no habló del tema con el presidente Alberto Fernández.

A pesar de la falta de contacto, Valdés destacó que el mandatario "seguramente está mandando ayuda y colaboración a través de sus ministros". 

"Me dijo que me quedará tranquilo que enviarían todos los recursos necesario", sostuvo el gobernador correntino en declaraciones a Radio Rivadavia. Asimismo, lamentó la situación porque en los Esteros del Iberá se desarrollaba un proyecto de "reimplantación" de especies extintas, la que iba camino a convertirse en la más grandes del mundo. Sin embargo, los 17 focos ígneos aún activos, paralizaron la iniciativa.

"Con el Centro de Conservación Aguará pudimos retraer algunos animales, como por ejemplo los guacamayos. También estamos haciendo un hospital de animales y ya llegaron más de 100 para que sean tratados por una red de veterinarios", precisó Valdés.

Por su parte, en Corrientes hay un operativo de trabajado con once aviones y helicópteros hidrantes y brigadistas combatiendo el fuego en la zona. En ese sentido, las llamas provocaron ya la pérdida de 780.000 hectáreas, hay familias evacuadas y más de 3.000 brigadistas combaten las llamas, pero no dan abasto.