50 Cent, el rapero que sobrevivió a todo

Foto: Instagram: @50 Cent

Exactamente 20 años atrás, 50 Cent aparecía en el mapa mundial del rap con su álbum debut Get rich or die triyin’. Con 12 millones de copias vendidas el año de su publicación, se transformó rápidamente en un éxito comercial y Fifty pasó de una peligrosa vida en las calles, a ser uno de los raperos más respetados del mundo.

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50 Cent: su infancia en las calles de Queens

Curtis Jackson fue criado en Queens (Nueva York) por sus abuelos. Su madre, reconocida en el distrito por traficar drogas, murió en un dudoso incendio cuando el cantante sólo tenía 8 años. El pequeño Curtis, que pasaba mucho tiempo en las calles, no tardó en seguir los pasos de su madre, y con tan sólo 12 años, se hizo un espacio en el mundo criminal comercializando crack.

Del mundo del tráfico al mundo del Rap

A sus 15 años, Curtis era respetado en el barrio. Con su pistola y su rudo temperamento, el futuro rapero hacía miles de dólares semanales. Pero a todos les toca una vez y detrás de cada traficante, hay siempre un policía. Por eso, las cosas cambiaron un poco en 1994 cuando el joven fue arrestado después de un allanamiento, y aunque pudo haber terminado 9 años en la cárcel, logró evitarlo pasando seis meses en un campo de entrenamiento.

Según el propio Curtis, volvió a las calles y siguió en el tráfico de drogas, pero esta vez, sin ser descubierto. No fue recién hasta 1996, con el nacimiento de su primer hijo, que pensó que debía alejarse del narcotráfico y trazar un camino en el rap. Para eso, no tardó en encaminarse y ese mismo año un amigo le presentó a Jam Master Jay de Run-DMC. El consagrado rapero ayudó a 50 Cent a mejorar sus rimas y lo apoyó firmando un acuerdo de distribución.

Foto:Instagram: @50 Cent

Escribiendo en sus letras lo que sucedía en las calles y en su propia vida, el rapero se hizo conocer rápidamente en el ambiente. El chico malo, que había tomado el nombre de un delincuente de los años 80’s, era auténtico cuando rapeaba y eso captó la atención de varias discográficas. Pero finalmente, fue Columbia Records quien se llevó la firma y contrató al artista en 1999. 50 Cent fue enviado al norte de Nueva York y en dos semanas había grabado veinte canciones. Entre ellas, “How to rob”, la controversial canción en la que el rapero se burlaba de una larga lista de personajes famosos y raperos. Con la publicación de la canción se creó un ambiente hostil alrededor del artista y su discográfica comenzó a preocuparse.

Los 9 disparos y la Lista Negra

En mayo del 2000, frente a la casa de su abuela, Curtis Jackson recibió nueve disparos sentado en la parte trasera del automóvil de su amigo. Varias partes de su cuerpo fueron heridas por las balas, pero fue el disparo en la mejilla lo que preocupó al rapero cuando se miró la cara ensangrentada en el espejo retrovisor.
El músico sobrevivió, pero mientras seguía internado en el hospital fue abandonado por la compañía discográfica.

Todo el asunto de gangsters y raperos era demasiado. Sin el apoyo de la compañía, Fifty no se detuvo y siguió publicando material independiente. Haber sobrevivido a nueves disparos lo hizo pensar que Dios tenía una misión importante para él.

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Eminem y Get rich or die triyin’

Por más talento que tuviera, nadie quería comprarse problemas. Y por temor a lo que podría suceder, ninguna discográfica se disponía a contratar a 50 Cent. El artista, literalmente, había entrado en la lista negra de la industria musical.
Con un sólo objetivo en mente, el músico se encargó de terminar con aquella mala racha y por medio de su abogado, logró hacer llegar una copia de su Mixtape: Guess who’s back a Eminem. El rapero quedó impresionado y poco tiempo después, Fifty era invitado a volar a Los Ángeles para encontrarse con él y Dr. Dre.

Eminem y 50 Cent. Foto: REUTERS

Todo fue en ascenso desde aquel viaje y en esa misma visita 50 Cent firmó un contrato por un millón de dólares: Eminem y Dr. Dre pondrían sus manos al servicio de las rimas del artista neoyorkino.

Lo que pasó en las grabaciones entre 2000 y 2002 fue mágico y sólo hizo falta una chispa para que el talento de los tres músicos encerrados en un estudio hiciera estallar una bomba en 2003 con la publicación de uno de los discos más exitosos del rap.